el hacer diario,
parar, sin penar
pensando mil cosas a la vez,
rápido.
una sensación
recorre el estómago,
sobre ella de puntillas
no le hago caso.
pronto un día
conciencia, me paro,
escucho lo que me dice:
¡Échate
el freno de mano!
para!, me dice a gritos,
que pareces un fantasma
ves que andas perdida
resto de tus sentidos?’
sal de tu encerramiento
quédate en ti
sea solo un momento,
poderte sentir.
mi energía se mueve
que he puesto conciencia,
de oxígeno se nutren
mis células.
se inicia el contacto
me llevará al encuentro
través de mis sentidos,
mi vida con la vida.
paro y respiro,
respiro;
paso lento
el olor de las flores
me encuentro en el camino;
los pajarillos
alegres cantan su trino,
acariciar mi pelo
el suave vientecillo
respiro,
por mis sentidos
me hacen sentir más viva
están como brillantes
y encendidos.
se ha acabado ese instante,
quiero seguir presente
los ahora que vengan,
vivir el siguiente.
es mi vida
del ruido,
de instante en instante,
el aquí y en el ahora,
si despierto vivo.
Guerrero