EL DONANTE DE AMOR

El donante de amor

Qué hacer cuando descubres que siempre te has sentido “no querida”.
Qué hacer cuando llegas a esta conclusión después de meses de diálogo contigo misma, en los que has pasado por tantas etapas que ya ni te acuerdas. Primero te sentías triste y llorabas; luego deprimida y seguías llorando; atemorizada, te escondías; feliz, pues te reías y de repente otra vez triste y hecha un desastre.
Mi cabeza que está pendiente desde hace tiempo de estos cambios emocionales, decide un día hurgar más abajo, así que llamo a la puerta del castillo implacable… mi corazón, ese lugar al que dejaste de ir por extraños motivos.
Tras duros momentos y pensamientos profundos, de dos paquetes de kleenex y un litro de agua, se me queda cara de interrogante cuando descubro por qué ese llanto no cesa, descubro de dónde viene y por qué está ahí, y es sorprendente.
Anteriormente el análisis constante de todos mis sentimientos me llevó a cerrar con candado la puerta del castillo, en ese momento pensé que era la mejor opción. Me había acostumbrado a que mi cabeza tomaba todas las decisiones así que ahora se volvía loca pensando que algo se le estaba escapando, por eso me ahogaba, y por eso lloraba, porque todo lo que había guardado ahí dentro durante años necesitaba salir.
Mi primera impresión me hacía pensar que tantas lágrimas sólo contenían sufrimiento y tristeza, pero ahora he descubierto que hay algo de eso, si, eso está ahí y lo acepto porque forma parte de mí, pero también hay algo más. Escuché mi interior, en ese momento sí dejé que me hablara y sentí que lo que llevaban mis lágrimas no era dolor, sino amor.
Sí. Es amor contenido durante años, es amor confundido que no sabe dónde ir, es amor perdido y es amor que pide salir, es algo que la cabeza no puede decidir.
Nunca me he permitido amar sin juzgarme a mi misma y nunca he dejado la puerta abierta a nadie, porque nunca me he querido a mi misma y no he dejado que los demás lo hicieran, por eso comenzaba diciendo que siempre me he sentido “no querida”.
Así que tengo un corazón lleno de sentimientos que no paran de girar y no saben dónde ir, por eso esta sensación de angustia que no me deja respirar, como que tengo un exceso de amor ahí dentro que se vuelve incontrolable para mi.
Y ahora, llegado a esta conclusión, siento que todo tiene sentido, la noticia me resulta agradable y me invade una increíble sensación de paz porque entiendo muchas cosas. Es como encontrar algo que llevas años buscando.
Sin embargo, como mente inquieta que soy, ahora hay algo que me preocupa, si tengo tanto amor dentro de mi ¿qué hago yo con todo esto? ¿A dónde voy con este exceso de amor? Imagino que debe ser como llevar más equipaje del habitual, vamos que no es muy agradable si no sabes para qué o cuándo lo vas a utilizar.
Y siento que eso vendrá solo, que por ahora no debo planear nada, tan sólo necesito abrir puertas y ventanas, dejar que corra el aire, y hacer cosas que no he hecho hasta ahora como abrazar, besar, sentir, dejar de lado tanta vergüenza y decoro y empezar a tomar decisiones con el corazón. De repente se abre un nuevo camino que no esperaba y por el que nunca he paseado, así que el tiempo y la experiencia me dirá dónde van los donantes de amor.
Texto y dibujo enviado a «MI REGALO PARA TI» una seguidora del blog.
Muchas gracias por compartir tu experiencia mujer valiente, rica y valiosa. Has encontrado tu tesoro, el AMOR que nutre los corazones, que abre las puertas a la vida y a la dicha de vivirla porque las puertas de la felicidad siempre abren hacia fuera. FELICIDADES

Autor entrada: MariaGuerrero