Una noche uno de los alumnos de DIPA MA, comenzó a hacerle muchas preguntas. Se mostraba desafiante y confrontador, desde lo abstracto e intelectual intentando provocarla para entrar en discusión. De repente ella se detuvo y dijo con voz muy calmada: «¿Para qué has venido? ¿Qué te propones?». La sinceridad de su pregunta le silenció de inmediato.