existencia es pasajera y corta, nada es permanente ni absoluto ni sólido ni
duradero, por eso tenemos que aprender a vivir en cada momento, volver la
atención hacia dentro, cuestionar los hábitos por los que nos conducimos y liberarnos de las ataduras por las que nos mantenemos atrapados.
con una nueva comprensión de nosotros, de los demás y del mundo que nos rodea, comprendiendo y comprendiéndonos un poco mas, ampliando nuestra visión de la vida y profundizando en ese quién soy que aún permanece oculto.
manera podemos disfrutar de todo lo que esta a nuestro alrededor, de todo lo
que se nos ofrece o se nos da.
respeto, y dejar salir a la persona que realmente somos, integrada por amor,
alegría, luz y esa esencia divina y mágica de la que estamos todos hechos.